martes, octubre 24, 2006

Fotos


Imágenes congeladas que para el espectador desprevenido no significan nada. Antes eran papeles extraños casi plastificados que guardaban sonrisas, cumpleaños, casamientos ,fiestas de quince, bautismos, conmemoraciones, entregas de diplomas o familias enteras posando para quedar atrapados en el purgatorio del porta retratos para después pasar al infierno del olvido en un cajón y finalmente a su viaje final en una bolsa plástica a compartir su descanso con su vecinos las yerba mate usada, la cáscara de banana, los potes de dulce de leche vacíos, la caja de pizza vacía y otros.
Hoy son bits y bayts. Realmente otra manifestación del código binario que nos modifica día a día.
Y así dejamos a la informática y a la tecnología la durísima tarea de compilar en pequeños discos compactos los momentos que en su mayoría de veces representan pequeños lapsos de felicidad. ¿Y a donde irán a parar finalmente? Porque todavía las computadoras no se hacen para comprender que ahí como en tantos otros lugarcitos se guardan los cachitos de nuestras vidas, pasando desapercibidas.
Veo fotos y me olvido de la imagen, gana por goleada el recuerdo del momento. Me encanta ver fotos viejas, mías o de mi gente. Porque ahí están finalmente. La prueba grafica de que alguna vez estuvimos aquí, que hicimos algo o que no hicimos nada en absoluto porque nada debíamos hacer. Porque es una buena forma de ver como la vida fue pasando sin avisar, sin pedir permiso y sin que la viéramos llegar. Y no saben como me gustaría tenerlos a todos en una única foto que todo lo diga, porque la fotos dicen mas cosas que el mejor libro del mundo, esa foto especial que tengo en mi cabeza y en mi alma.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una vez estabamos mirando fotos con unas amigas, y un hombre se acerca y nos dice: "pero esas no hablan", quede sorprendida, y continúe pensando por el resto de la noche...hasta que dije ¡que no van a hablar! jajaja, a veces dicen demasiado, no?
saludos

Ah! y le deje una tarea en mi blog